161) LAS PASIONES.
Las pasiones son caprichos
que se esconden en la mente,
como deseos encerrados
en el fondo del subconsciente.
Son tiempos perdidos,
que nuevamente han florecido
y que se mezclan y desvanecen
cuando terminan los sueños.
Son ilusiones quebradas,
sentimientos dormidos
y como estrellas fugaces
que vagan en el olvido.
Las pasiones rompen,
desgarran, agitan, azotan,
te sitúan y confunden fuera
de la realidad y del tiempo.
Son múltiples sensaciones
que afloran y surgen
en cualquier lugar
y cualquier momento.
Son voces de sirenas
que están varadas
en mares perdidos
y olvidados en el tiempo.
Son esperanzas que tenemos
insatisfechas, incompletas,
que no llenan ni cubren
nuestros ocultos deseos.
Las pasiones son locura,
mezcla de la tierra,
el agua, la luz y el fuego,
girando en los cuerpos.
Son impulsos que llenan,
que se introducen y calan
como una fina lluvia
y un suave viento.
Son primaveras dormidas
que están esperando
nacer de nuevo
y vivir dulces momentos.
Son luces fugaces
llenas de sueños,
imaginaciones encendidas
en sentimientos nuevos.
Las pasiones son dolores
de días negros y culpables
de esas noches dormidas
que te dejan sin aliento.
Son fuegos pasajeros
que andan y marchan solos
buscando mil destinos
sin encontrar su camino.
Son la eterna búsqueda
en un laberinto de paredes
y de ojos que te contemplan
que oscurecen la salida.
Son mares profundos
donde se navega solo,
en un barco de madera,
sin timón y sin vela.
Pasiones, cuantas pasiones,
que te llenan, conmueven,
que te acogen y confunden
lapidando los sentimientos.
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